Siempre vienen bien unos cuantos comentarios sobre en qué consiste una sesión de fotos y que deberíamos hacer con nuestro amigo peludo.
El es el que manda, nos va a marcar la forma y el ritmo.
La mayoría de las personas piensan que ser fotogénico es algo especial, reservado a unos pocos, pero la verdad es que ser fotogénico es mostrarte como eres. Todos somos diferentes y eso es lo que nos diferencia y nos da personalidad. Con los animales pasa lo mismo, no hay bonito o feo simplemente cada uno es distinto. Para cada persona su animal es el mejor, así que lo primero es mostrar como sois tu amigo peludo y tú.
La sesión fotográfica puede ser en exterior o interior.
En interior, dentro del estudio, la luz está controlada, los animales pueden estar sueltos y relajados, sin peligro. No dependemos de la hora de luz y de la climatología. Trabajamos con fondos neutros para que destaquen los modelos.
En la sesión exterior dependemos más del entorno, la luz, la Climatología y la seguridad, para dar rienda suelta a nuestro amigo.
Son opciones distintas, ¡Tú eliges!
El día de la sesión ven relajado a disfrutar, si tu amigo te ve relajado también el estará tranquilo.
Es mejor que haya dado un paseo para soltar esa adrenalina que tiene también es bueno que no haya comido mucho, para que podamos ofrecerle algunas golosinas al ayudarnos durante la sesión. Podéis traer collares, correas o algún juguete que tenga, seguro que ayudará a que esté más calmado. Las personas es mejor que se pongan ropa neutra como camisa blanca o trajes neutros, sin color o formas que puedan distraer la atención.
¡Lo importante es que vengáis a disfrutar!